Qwerty / Historias De La Ciencia

Las lágrimas que se producen por la presión emocional cuentan con una composición química que permite la producción de piezoelectricidad. Además, la ciencia ha demostrado que transportan señales químicas que producen, por ejemplo, la inhibición del deseo sexual en el hombre, modificando incluso la actividad cerebral y la secreción de testosterona.